Transformación en el Espejo: El Nerd que se Convierte en la Estrella del Porno Gay

Había una vez un nerd llamado Alan, quien vivía en su propio mundo de cómics y videojuegos. Se consideraba poco atractivo y débil, y por eso solía pasarse el día soñando con ser alguien más. Un día, mientras limpiaba el ático de su abuela, encontró un antiguo espejo de cuerpo entero. La abuela le dijo que tenía más de cien años y que se decía que estaba encantado. Alan, aunque no era supersticioso, siempre le gustaba la idea de la magia y decidió darle una oportunidad. Mirándose en el espejo, decidió probar un hechizo. "Deseo ser Roman Todd," dijo, mencionando el nombre de un actor de porno gay y bisexual que siempre había admirado por su físico imponente y narcisista, siempre presuntuoso en su íntimos boxers blancos. Para su sorpresa y asombro, el reflejo en el espejo comenzó a cambiar. De repente, en lugar de su reflejo, vio el de Roman Todd. No podía creer lo que estaba sucediendo. Alargó su brazo y tocó el espejo, y en ese instante ocurrió un cambio. De repente, Alan ya no era él, se había convertido en Roman Todd. Se miró en el espejo, encontrándose con un cuerpo musculoso y atractivo. El cambio era permanente; se había convertido completamente en Roman Todd. La emoción le embargaba y la tentación de utilizar su nuevo atractivo para aprovecharse de su vida se hizo cada vez más fuerte. Alan, convertido ahora en Roman, se enamoró de su nuevo físico y se volvió superficial. Decidido a probar su nueva vida, decidió ocultar el espejo y mantener secreto su cambio. A partir de ese día, se convirtió en Roman Todd para siempre, disfrutando de su nueva vida llena de atención y admiración. Podemos decir, que Alan, el nerd, encontró una nueva versión de sí mismo en la que se enamoró y decidió quedarse para siempre. Fue un cambio profundo no solo en su aspecto, sino también en su personalidad, pues demostró que la apariencia puede cambiar a una persona de manera radical, llevándola a veces a olvidar quién era antes. Aunque Alan disfrutó de su nuevo físico y vida, siempre será interesante reflexionar, ¿habría sido igual de contento si hubiera aprendido a amarse a sí mismo tal y como era?