The Nerd's Desire: Love and Supernatural Muscles

Era una tarde lluviosa cuando Lucas, un joven de 17 años con gafas gruesas y una constitución delgada, regresaba a casa después de otro día miserable en la escuela. Su rutina de siempre: ser el blanco de constantes burlas y abusos, no solo por parte de sus compañeros, sino también por su némesis, Nick Walker, un entrenador de gimnasio de 30 años con un físico impresionante y una actitud despiadada. En su camino a casa, Lucas pasó por una tienda de antigüedades que nunca antes había notado. Entró sin pensarlo demasiado, con la esperanza de encontrar algo que pudiera distraerlo de su realidad. En una esquina polvorienta, encontró una lámpara que parecía sacada de un cuento de hadas. Era antigua y reluciente a pesar del polvo que la cubría. Sin esperar mucho, la compró y la llevó a casa. Esa noche, mientras limpiaba su nueva adquisición, un humo brillante emergió de la lámpara y ante su asombro, apareció un genio. "Haré realidad un deseo tuyo", dijo el genio con una voz retumbante. Sin pensarlo, y con la imagen de Nick Walker burlándose de él grabada en su mente, Lucas exclamó: "Deseo ser Nick Walker". Al día siguiente, Lucas se despertó en una habitación desconocida. Al verse en el espejo, descubrió, con sorpresa, que ocupaba el cuerpo musculoso y atractivo de Nick Walker. En sólo unos boxers ajustados, se flexionó frente al espejo y dijo en voz alta: "No volveré a mi antiguo cuerpo; este cuerpo es perfecto. Mirad este rostro tan varonil y estos músculos." Lucas, ahora en el cuerpo de Nick, decidió que su primer paso sería confrontar a su antiguo torturador, ahora atrapado en su frágil cuerpo adolescente. Usando su nueva apariencia imponente, encontró al ahora débil y asustado Lucas verdadero. Amenazándolo con revelar el intercambio de cuerpos, y usando su nuevo semblante autoritario, obligó a Nick a aceptar no revelar nunca el secreto. Para asegurarse de que Nick no tuviera oportunidad alguna de revertir su situación, Lucas propuso que Nick vivieran juntos y, para mantener la fachada, que fueran pareja. Aunque Nick odiaba la idea, no vio otra salida y aceptó a regañadientes. Con el tiempo, la convivencia obligada se convirtió en algo más. Lucas, ahora disfrutando de los privilegios de su nuevo cuerpo perfecto, comenzó a conocer a Nick desde otra perspectiva. Descubrió que debajo de la apariencia de su torturador se escondía alguien con inseguridades y arrepentimientos. También comprendió que su antigua vida de bullying no había sido tan diferente en el fondo a la de la víctima que había sido él. El odio y el resentimiento que Lucas sentía hacia Nick comenzaron a transformarse en algo diferente. La convivencia diaria, las charlas nocturnas y el aprendizaje mutuo hicieron que surgiera algo inesperado: el amor. A pesar del pasado oscuro, Lucas y Nick encontraron una forma de sanar juntos y aceptarse el uno al otro, no por sus cuerpos, sino por quienes realmente eran por dentro. La verdadera magia, descubrieron, no estaba en los deseos cumplidos, sino en el corazón y la capacidad de cambiar y crecer.