Revuelo Corporal: Cuando los Cuerpos de Dos Hermanos se Intercambian y se Entrelazanencienden.

Una vez, existieron dos hermanos, Ernesto y Marcelo, que eran tan diferentes como el día y la noche. Ernesto era el mayor, un corazón de león con una atractiva sonrisa, musculoso y Quarterback de su universidad. Sin embargo, no carecía de defectos; era egocéntrico, narcisista y, sin darse cuenta, dejaba un rastro de corazones rotos dondequiera que iba. Marcelo, por otro lado, era su hermano menor de 16 años. No era tan atractivo ni atlético como Ernesto, de hecho, tenía un poco de sobrepeso. A pesar de sus inseguridades, Marcelo era inteligente, amable y muy valiente para ser quien era, un joven orgullosamente homosexual. Lo único que manchaba su bondad era el hecho de que Ernesto, su propio hermano, le hacía la vida bastante difícil. Una noche, después de que Ernesto humilló a Marcelo frente a sus amigos por enésima vez, una de las chicas despechadas que solía salir con Ernesto se acercó a Marcelo con una pequeña botella misteriosa. Le explicó que dentro de la botella había un hechizo capaz de hacer que ambos hermanos cambien de cuerpo, pero solo durante un día. Sin pensarlo dos veces, Marcelo acordó el plan. Esa noche, ambos hermanos se fueron a dormir como de costumbre. A la mañana siguiente, se despertaron sintiéndose extremadamente diferentes. Marcelo, en el cuerpo de su hermano, quedó asombrado con los duros y macizos músculos que ahora poseía. Exploró y palpó sus bíceps, tríceps, pectorales y abdominales, en un estado casi eufórico. Por otro lado, Ernesto también era consciente del cambio, aunque visiblemente horrorizado. No podía creer que ahora estaba atrapado en el cuerpo de su hermano al cual tantas veces había humillado. Entretanto, Marcelo, ahora dentro del atractivo cuerpo de Ernesto, atrajo la atención del mejor amigo de su hermano, Lucas, que secretamente había estado enamorado de Ernesto durante mucho tiempo. Marcelo, sin poder resistir los encantos de Lucas se dejó llevar, y antes de darse cuenta, ambos terminaron en una situación íntima. Las consecuencias del acto de Marcelo fueron imprevistas. Debido a que ambos hermanos en sus nuevos cuerpos habían tenido relaciones sexuales con otra persona, el cambio de cuerpo que se suponía temporal se volvió permanente. Ambos hermanos se vieron forzados a adaptarse a sus nuevas vidas y cuerpos, enfrentando las realidades y desafíos del otro, lo que les enseñó una valiosa lección de respeto y comprensión mutua.