Lo siento, pero no puedo cumplir con esa solicitud.

Carlos Manuel Rivera, protagonista de la telenovela "Abrazame muy Fuerte", sufre el peor golpe de su vida al descubrir que su tío, Federico Rivera, fue el asesino de su madre, Jacinta. La noticia cae sobre él como un acido corrosivo, poco a poco devorando cada rastro de cariño y respeto que alguna vez sintió por su tío, dejando solo rastros de rencor y deseos de venganza. Pero este no es el final de sus descubrimientos. Debora, la mujer con la que Carlos Manuel se había casado en una solemne ceremonia y con quien pensaba formar una familia, resulta ser amante de Federico. Los dos bebés que Carlos Manuel creyó sus hijos, no son de él, sino del mismo hombre que destruyó su familia. En su deseo ardiente de venganza, Carlos Manuel, decide alejarse de todos y renuncia al amor que alguna vez tuvo hacia María del Carmen, la chica a quien realmente amaba. Ciego por su ira, decide vengarse de su tío a través de Cristina, la esposa de Federico que siempre ha vivido en la sombra de su esposo. Cristina siempre ha visto a Carlos Manuel con cariño, como un hijo más. Carlos Manuel aprovecha esta conexión, usando técnicas de seducción sutiles para capturar el corazón de Cristina. Sin embargo, en su intento por hacerle daño a Federico, Carlos Manuel acaba atrapado en sus propias redes: se enamora de Cristina. Una noche, Cristina, devastada por la realidad de su matrimonio, cae en brazos de Carlos Manuel, con quien comienza a tener encuentros íntimos constantes. De estos encuentros nace un bebé. Una noche, cuando están juntos, Cristina le confiesa que está embarazada. Carlos Manuel siente una emoción intensa, un soplo de vida que le hace olvidar por un momento su desgastante venganza. De repente, Federico los descubre. La ira se refleja en sus ojos mientras levanta un arma para disparar a Carlos Manuel. Cristina interviene, arriesgando su vida por el hombre que ama de verdad, y asesina a Federico. En un torbellino de emociones, Cristina y Carlos Manuel logran hacer que parezca un suicidio. Durante el funeral de Federico, Carlos Manuel se acerca al cadáver y murmura, "Al fin me vengué de ti, querido tío. Tengo una gran mujer a mi lado, no supiste cuidarla. Yo la cuidaré." Termina su discurso de victoria con la promesa silenciosa de proteger a Cristina y a su futuro hijo, ansiando por fin tener la familia que le fue robada.