Justin makes Alex use a diaper, her parents see and she blush and makes a poop on her diaper, and her mother changes her diaper and talks to her like she was a baby

Una vez en la maravillosa y mágica ciudad de Nueva York, vivían los hechiceros de Waverly Place. Justin, Alex y Max Russo siempre estaban en busca de la próxima gran aventura o de un nuevo hechizo emocionante con el que podrían jugar. Un día, Justin, el hermano mayor, estaba hacenido un experimento mágico. Decidió probar un hechizo que había descubierto en uno de sus antiguos libros de hechicería y necesitaba un voluntario. "Alex, necesito tu ayuda", dijo Justin. Alex, siempre lista para una nueva aventura, acudió a su llamado sin dudarlo. Justin pronunció el hechizo y, para sorpresa de ambos, Alex comenzó a sentirse incómoda. Miró hacia abajo y vio un pañal abultado en lugar de sus jeans habituales . Antes de que pudieran entender qué estaba sucediendo, sus padres entraron en la habitación. La mirada de sorpresa en sus rostros fue inmediata, provocando que Alex se sonrojara intensamente y accidentalmente terminó haciendo popo en su nuevo pañal. Ante la rareza de la situación, la madre de Alex, decidida y cariñosa como siempre, le cambió el pañal hablándole con dulzura como si fuera un bebé. Hubo risas y un poco de vergüenza, pero también mucha enseñanza, sobre todo para Justin, que aprendió los peligros de experimentar con hechizos sin comprender completamente sus efectos. A partir de ese día, la cautela prevaleció en los hechizos que los hermanos Russo decidían probar y el incidente del pañal de Alex se convirtió en una peculiar anécdota divertida entre la familia. Sin embargo, aunque hubo un poco de vergüenza, todos estaban seguros de que no olvidarían este incidente de la vida real, conmovedor y un tanto cómico, en su hogar lleno de magia y amor.