Inesperadamente Enamorados: La Venganza de Eros sobre Christian de la Campa

Christian de la Campa, un renombrado actor y modelo, era conocido por su gran talento y su inigualable atractivo. Sin embargo, en la intimidad, mostraba una faceta despreciativa y humillante hacia aquellos que él consideraba inferiores. Uno de estos inferiores era su empleado, Raúl, un inmigrante latino que había cruzado la frontera en busca de una vida mejor para sus hijos. A pesar de ser tratado como un ser inferior, Raúl permanecía firme, siempre sonriendo, soñando en silencio un futuro mejor para su familia. Una mañana, después de una particularmente ardua sesión de humillaciones, Raúl se encontró pidiendo ayuda en silencio. Escuchado por la deidad del amor, Eros, al ver así tratado a Raúl, decidió que sería justicia divina castigar a Christian por su actitud. Desde ese día, Christian comenzó a tener sentimientos inexplicables hacia Raúl. Cada vez que lo veía, su corazón latía desbocado, y una necesidad abrumadora de tenerlo para sí mismo creció en su interior. Raúl, por otro lado, no compartía estos sentimientos. Aunque se sorprendió por el repentino cambio de actitud de su empleador, no tenía ningún interés en él más allá de lo profesional. Sin embargo, la seducción innata de Christian, sumado a unos afrodisíacos que ingirió sin darse cuenta, hizo que sucumbiera y terminaran teniendo relaciones sexuales. No contento con eso, Christian, impulsado por su obsesión, hizo que Raúl firmara un acta de matrimonio sin que éste lo entendiera completamente. Habilidosamente hablando, Christian le explicó que era solo un contrato de trabajo. Raúl, confiando en su palabra, firmó. Finalmente Christian había conseguido lo que quería, el corazón de Raúl. Sin embargo, esta historia no deja de ser una advertencia para aquellos que tratan con desprecio a sus semejantes. Los dioses, en especial Eros, siempre están observando.