Inesperadamente Enamorados: La Obsesión de Eros con un Giro Inesperado

Una vez, en las calles brillantes de Hollywood, vivía un actor y modelo popular llamado Christian de la Campa. A pesar de su apariencia engañosamente atractiva y su talento en la interpretación, Christian arrastraba una sombra oscura. Tenía un criado llamado Carlos, un inmigrante latino que había cruzado ilegalmente la frontera para trabajar y mandar dinero a su familia. Carlos soportaba a diario el desdén y las humillaciones de Christian, pero nunca mostró un signo de debilidad. Un día, mientras Christian continuaba con sus crueles castigos hacia Carlos, Eros, el dios del amor, lo observaba desde las alturas. Profundamente molesto por el trato de Christian, decidió castigarlo. Invocó un hechizo y en un instante, Christian se encontró perdidamente enamorado de Carlos. A pesar del cambio de actitud de Christian, Carlos no correspondía a sus sentimientos. Sin embargo, Christian, ahora encantado por un deseo inexpugnable, ideó un plan. Utilizando su habilidad natural para la seducción, combinada con unos afrodisíacos que Carlos consumió sin saberlo, Christian pudo hacerle caer en su trampa. Como cierre de su plan, Christian hizo que Carlos firmara unos papeles, asegurándole que eran solo una renovación de su contrato. No sabiendo leer en inglés, Carlos firmó, sin darse cuenta de que en realidad estaba firmando un acta de matrimonio. Así, Christian logró su cometido, convirtiendo su obsesión en realidad. Sin embargo, su victoria se vio ensombrecida por la aparición de Eros una vez más, recordándole que todo había sido solo un castigo y que su amor obsesionado estaba destinado a convertirse en su propia ruina. Carlos, por su parte, permaneció sin saber del engaño, solo deseando poder enviar más dinero a su familia. Y así el destino castigó a Christian de la Campa por su prepotencia y crueldad.