Darkness Rising

Érase una vez, en el pequeño y encantador pueblo de Storybrooke, donde vivían numerosos personajes de cuentos de hadas, el atractivo y musculoso príncipe Encantador, conocido en este mundo como David Nolan, llevaba una vida tranquila junto a su amada esposa Mary Margaret y su valiente hija Emma Swan. Sin embargo, el destino tenía otros planes para David. Un día, durante una misión en el bosque, David encontró una extraña botella que resplandecía con un brillo esmeralda. Sin saber que la botella contenía una poción preparada por la cruel bruja Zelina del Oeste del Mundo de Oz, David, cansado y sediento, bebió su contenido. En cuestión de minutos, la poción hizo efecto y David sintió un oscuro poder invadiendo su cuerpo. Sus ojos perdieron el brillo bondadoso que solían tener y su corazón se volvió frío y despiadado. Los recuerdos de su amor por Mary Margaret y Emma fueron reemplazados por un odio profundo e inexplicable. Mary Margaret y Emma se dieron cuenta de inmediato del cambio en David, pero no pudieron evitar lo inevitable. Consumido por una furia inexplicable, David atacó a Emma primero, acusándola de haberle robado a su hijo, Henry. La batalla fue feroz, pero Emma, aunque fuerte y valiente, sucumbió a la brutalidad de su padre. Mary Margaret intentó calmar a David, recordándole el amor que compartían, pero sus palabras cayeron en oídos sordos. David, cegado por la poción de Zelina, asesinó a su esposa sin piedad. Con un corazón lleno de odio y maldad, David decidió que debía recuperar a su supuesto "hijo". Encontró a Henry y, a la fuerza, lo llevó a un nuevo hogar, lejos de Storybrooke. En este oscuro y aislado lugar, David estableció nuevas reglas para su "familia". — No me llames abuelo. Soy tu padre, entiendelo, soy tu papá — le gritó a Henry la primera vez que el niño, confundido y asustado, lo llamó abuelo. El sonido de una cachetada resonó en la habitación, seguido por el llanto silencioso de Henry. — Perdóname por el golpe, eres lo que más amo en la vida — murmuró David, abrazando al niño con una intensidad casi sofocante. Henry, aterrorizado, no pudo hacer más que asentir, atrapado en una red de confusión y miedo. Así, bajo la influencia de la poción de Zelina, David Nolan, el Príncipe Encantador, se convirtió en un villano malvado, cruel y egoísta, reteniendo a Henry como su "hijo" en un retorcido reflejo de lo que alguna vez fue una familia llena de amor. La única esperanza de Henry residía en encontrar una forma de liberar a su abuelo del hechizo que lo había convertido en un monstruo, mientras el oscuro reinado de David continuaba en su nuevo hogar.