Amor Inesperado: Un Deseo Hecho Realidad

Era una mañana gris cuando Lucas, un joven de 17 años, delgado, con gafas grandes y un amor insaciable por las matemáticas, encontró una tienda de antigüedades en el callejón más oscuro de la ciudad. Dentro, entre polvo y recuerdos olvidados, descubrió una lámpara dorada, de diseño intrincado y tentadoramente barata. La compró sin pensarlo dos veces, fascinado por su peculiar belleza. Al llegar a casa, en la soledad de su habitación, frotó la lámpara con la intención de limpiarla un poco. Sin previo aviso, un genio apareció envuelto en una nube de humo dorado. "Soy el genio de la lámpara", anunció con voz resonante. "Puedo concederte un deseo. Piensa sabiamente." Sorprendido y sin pensar demasiado, Lucas dijo: "Deseo que el entrenador Héctor, esa bestia musculosa de 33 años que me hace la vida imposible, me ame y sea mi novio posesivo y protector." El genio sonrió de una manera misteriosa. "Concedido", dijo antes de desaparecer. Lucas no se lo tomó muy en serio, pensando que había sido una imaginación suya. A la mañana siguiente, Lucas se despertó en un entorno familiar, su pequeña habitación, pero algo era distinto. Al lado suyo, en la cama, estaba Héctor, el imponente entrenador de la preparatoria, pero con una expresión completamente diferente. En lugar de la habitual mirada de desprecio, tenía una sonrisa tierna y amorosa. "Buenos días, amor," dijo Héctor, acariciando el rostro de Lucas con una delicadeza que nunca hubiera esperado de él. "Ya he preparado nuestro desayuno y en breve nos vamos a la prepa. Recuerda, amor, que en la prepa nadie debe saber que somos novios y que vivimos juntos. Yo quisiera gritar a los cuatro vientos lo mucho que te amo, pero debemos ser discretos." Se inclinó para darle un beso en la frente. "Además, esta noche es nuestro aniversario de cinco meses de noviazgo. Asegúrate de estar preparado; esta noche te haré el amor como nunca nadie te lo ha dado ni podrá darlo jamás. Eres mí