A New Beginning: A Father and Son's Journey Through Darkness and Redemption

Érase una vez un padre de nombre Gabriel, de 35 años, musculoso, atractivo y deslumbrante. Pero bajo esta apariencia yacente residía un carácter narcisista y ególatra, que siempre trataba a su hijo, Ángel, un chico de 15 años introvertido y con aires de nerdo, de manera prepotente e insensible. Gabriel siempre compensaba su falta de afecto hacia Ángel con múltiples mujeres a su lado, pero una noche en particular, su vida dio un giro drástico. Una mujer con quien compartió le clavó los dientes en el cuello, revelándose como una vampiresa. A partir de ese suceso, Gabriel empezó a ver a las personas como presas, seres listos para ser cazados y devorados. Una noche, Gabriel estaba a punto de atacar a una mujer, cuando intervenió Ángel, salvando a la mujer de un horrible destino. Gabriel, furioso, iba a morder a su propio hijo. Sin embargo, al oler su sangre, un instinto primitivo se desató. Fue un grito interno que clamaba "heredero", que conseguía hacer volver a Gabriel a su cordura. Ante el desesperado estado de su padre, Ángel, en un acto de suprema empatía, se cortó y le ofreció parte de su sangre. Este bandeau de sacrificio se convirtió en el primer lazo sólido entre padre e hijo. Con el paso del tiempo, la ciudad descubrió la verdadera naturaleza vampírica de Gabriel y comenzó a cazarlo. Gabriel, viéndose en peligro, escapó de la ciudad con su hijo, y en esa travesía, para asegurarse que no quedaría solo, mordió a Ángel, convirtiéndolo en un vampiro como él. A esta transformación, siguió una relación padre-hijo mucho más fuerte, en donde la dependencia mutua y el aprendizaje de vivir una nueva vida como vampiros, creó un vinculo de amor que nunca habían experimentado antes.